La mano de Hyeon-seo abofeteó mi mejilla una vez más. Dolió un poco porque él tenía una constitución corporal bastante buena, iba al gimnasio constantemente y tenía fuerza en los brazos.
-¡Idiota! ¿No puedes hacer nada bien?
No había una buena razón como para recibir una cachetada en la mejilla, solamente porque estos días he estado un poco distraído y he descuidado mis deberes como secretario. Tenía muchas cosas que decirle en ese instante, pero me contuve, respiré profundo y me disculpé.
-Lo siento.
-¿Cuánto tiempo has estado afuera?, ¿has olvidado tus obligaciones?
-Pasé algo de tiempo en el hospital, porque no me sentía bien.
De hecho, después de todo lo que ocurrió con Baek Do-ha ese día, estaba un poco confundido. Lo único que pude hacer fue salir corriendo del baño e ir hacia el estacionamiento subterráneo por mis inhibidores.
-¿Qué no eres capaz de manejar tu horrible condición por ti mismo? No puedes ausentarte cada vez que te sientas mal.
Es verdad que nunca había tenido que ir al hospital por cualquier cosa, excepto las veces que tenía mis chequeos obligatorios. Todo era igual desde llegué a esta casa a los 18 años. Hyeon-seo esclavizó mi vida. Nunca tuve citas con amigos y he vivido como un esclavo por 10 años, encadenado a un estúpido demonio llamado Hyeon-seo.
Todo este tiempo he tenido que callar, contenerme, incluso aceptar golpes sin poder defenderme. Tengo tantas ganas de decirle de todo, pero aún no es conveniente.
-No estaba desperdiciando mi tiempo en citas si es lo que insinúa, sé muy bien que estoy atado al Sr. Hyeon-seo todo el día y no tengo tiempo para mí mismo.
Hyeon-seo me miró con una cara de confusión.
-¿Qu-Qué estás diciendo? Joder, ¿Te piensas rebelar contra mí?
Con ojos llenos de furia Hyeon-seo volvió a levantar su mano y un golpe azotó mi otra mejilla. Mis labios estaban a punto de estallar, temblaban, incluso sentí que sangre brotó de ellos; levanté rápidamente mi mano y me limpié los labios.
-Oye Seol-Woo, ¡¿qué te crees?! ¿No recuerdas que estás en esta casa para pagar el dinero que mi padre les dio a los prestamistas? ¡Tú hijo de puta! ¿Te sientes tan importante? Eres un simple error de la codicia de tu madre ¿O aún crees que tu madre se acercó a mi padre por amor? Eres un imbécil.
Sobresaltado levanté mi rostro.
-Mi madre…
-Jajaja sí, ¿no sabías? Tu madre le rogó a mi padre para que él entrara entre sus piernas. Ella necesitaba de un proveedor y como no pudo convertirse en el amor de mi padre se volvió loca, se hundió en las apuestas. Tú eres solamente el pago de una factura, eres una simple cosa repugnante.
Ese momento fue el más terrible de mi vida. No pude responder absolutamente nada, solo me mordí los labios y me tragué el resentimiento.
-¿Sabes todo el dinero que mi padre ha pagado por ella? Es asombroso que aún no la hayan matado después de todo.
Sé que la verdad a veces puede ser muy dura, pero Hyeon-seo tiene razón.
¿Por qué me toco a mí ser hijo de un Alfa Real? He estado lidiando toda mi vida con esa pregunta. Me siento atado por una deuda y los peores acreedores de este mundo. Mi vida se consume día a día.
Nada es lo parece, lo que me ata a esta familia no es precisamente el lindo vínculo entre padre e hijo… pero bueno…
Mi estómago duele, no deja de pedirme comida, no he comida durante todo el día porque debía ir al hospital y escuchar todas las estupideces de Hyeon-seo.
Aggh, lo único que puedo hacer es cerrar mis ojos y morderme los labios.
-¿Sabes que mi padre te está dando una gran oportunidad al quedarte en esta casa?
-Sí, lo sé y estoy muy agradecido con el presidente.
Tengo muy claro que el presidente fue mi salvavidas. Si él no me hubiera ayudado, ya estaría enterrado en alguna colina y mis órganos estarían en el mercado.
-¿Tú me odias? Porque yo si te odio, te aborrezco, tienes la misma cara que tu madre. Todos me adoran y para mí no será problema encontrar un buen matrimonio, pero tú no tienes la misma suerte, ¿quieres dejar esta casa? Primero págale a mi padre todo lo que le debes.
-Cuando todo acabe, no regresaré.
La mayoría de los prestamistas tenían un interés del 9%. Las deudas fueron ascendiendo y todo lo que teníamos no cubría ni el 90% de la deuda y ellos exigían como pago el dinero o la vida. No pude evitarlo, el presidente pagó toda la deuda de mi madre, fue una cantidad tremenda. Aún si trabajo toda la vida, nunca podré pagarle todo, incluso si vendo mi alma eso no sería suficiente.
Lo único que me queda ahora es bajar la cabeza y seguir órdenes. Necesito sobrevivir.
-No te preocupes, haré mi trabajo lo mejor que pueda.
Eso fue lo único que respondí. Hyeon-seo estaba sentado en el sofá, tenía las piernas cruzadas y su rostro estaba lleno de satisfacción como el ganador de una batalla.
-Tráeme café.
Todo había terminado por ahora así que me dirigí a la cocina.
[Ding-dong.] Sonó el intercomunicador, alguien había ido a comprobar de quién se trataba, luego de eso ingresó con una gran canasta de flores.
-Han traído una gran canasta de flores.
-Está bien, déjala por allí.
Por supuesto Hyeon-seo pensó que era para él y solo observaba la canasta desde lejos; incluso yo pensé que era para él, es común que Hyeon-seo siempre reciba regalos.
-Este presente es para Seol-Woo.
Hyeon-seo que estaba mirando su teléfono, de repente alzó la mirada y me apuntó.
¿Para mí? Esto es raro.
La sirvienta se acercó y me entregó la canasta de flores, tuve que recibirla. Tenía una fragancia tan dulce y agradable, me perturbaba el saber quién había mandado un presente tan hermoso para mí. La tarjeta del remitente estaba vacía, ¿Quién pudo haberlas enviado?
-¿Quién es el loco que te envía eso?
Hyeon-seo se acercó, tomó la tarjeta y después de verla, la aventó hacia un lado.
-¿Quién diablos lo envió?
-No lo sé.
Era verdad, no sabía quién lo había enviado, había una pequeña caja en medio de las flores, Hyeon-seo la agarró y la abrió.
-¿Qué es esto?
Dentro de la caja había un frasco de vidrio con unas pastillas.
-Ja, ja, ja, supongo que tu amante se la pasa bien contigo, si eres lo suficiente bueno para él, como para que te envíe todas tus medicinas y más.
-…
Aunque lo negué parece que estaba convencido que estaba saliendo con alguien.
-No sé qué tipo de persona sea, tampoco me interesa saber, pero enviarle flores a un hombre, eso es ridículo.
El sonido de Hyeon-seo golpeando las flores, la conmoción de las sirvientas, y el hecho que me enviaran pastillas, todo eso tenía mi mente echa un lío, ¿Quién eres?
-Me duele la cabeza, el olor de las flores es terrible, saldré de aquí.
Hyeon-seo se fue sin dar problemas. Es evidente que está celoso. Saludé al personal y me dirigí a mi habitación con la canasta de flores en las manos.
Después de salir de mi habitación me dirigí hacia donde se encontraba Hyeon-seo. Mi celular sonó, lo saqué apresuradamente de mi bolsillo y vi en la pantalla el nombre de Baek Do-ha. Hyeon-seo estaba sentado cruzado de piernas, no sabía qué hacer, así que solo me dirigí hacia el jardín e inmediatamente contesté la llamada.
-Hola.
[-¿Recibiste la canasta de flores?]
Su voz tenía un tono tan amable, se escuchaba tan claro, incluso si el sonido llegaba a través del celular… Oh, ¿Fue un regalo de Baek Do-ha?
-Sí, lo recibí…
[-¿Lo recibiste?]
-¿Por qué envió algo como eso? – Lo escuché reír levemente.
[-¿Existe una ley en la que diga que no puedo enviar flores? ¿Eres alérgico a las flores?]
-No, no es eso, simplemente nunca pensé en recibir un regalo y menos flores.
[-¿Debe haber una razón? Solamente quería enviártelas.]
-…
Entonces añadió inmediatamente luego del breve silencio.
[-¿Quieres que te dé una razón o quieres que me disculpe?]
-¿Por qué se comporta tan gentilmente?
[-Te lo dije, no soy un hijo de puta.]
Una sonrisa sarcástica salió de mi boca, quería aventarle el frasco de pastillas.
-Por cierto, ¿un regalo de flores para un hombre?
[-Cuando pasé por la floristería y vi las flores en exhibición, pensé en ti. Eres hermoso como esas flores.]
Mis pensamientos se distorsionaron en un instante. Me dolió el estómago y el pecho.
–No lo pregunté yo, lo preguntó Hyeon-seo. Él cree que soy bastante horroroso como para que alguien me mande un regalo.
[-Ah ¿sí? Yo creo que eres muy lindo.]
Su voz tenía un tono tranquilo que hizo que me quedara sin palabras.
[-Hyen-seo es bastante común y aunque todos lo elogian, no sé por qué lo hacen ¿o es que todos los que lo ven están ciegos?]
-…
[-Si te comparo con él, tú eres mucho mejor]
Seguía y seguía alabándome, quería decirle que se detuviera, pero las palabras no salían de mi boca.
No sabía qué tipo de reacción tenía, pero es común que se alabe a una persona hermosa y más si es una mujer; pero este hombre se está dirigiendo a mí.
Estaba realmente nervioso, no sabía qué decir, todo me daba vueltas, estaba totalmente confundido, pensé que incluso iba a empezar a temblar. Estaba realmente nervioso, no sabía qué decir, todo me daba vueltas, estaba totalmente confundido, pensé que incluso iba a empezar a temblar. Diciendo esto y aquello, él no paraba ¿en verdad soy hermoso?
No paraba. Su voz se escuchaba tan entusiasmada, como un niño describiendo lo que más le gusta en el mundo.
[-Sabes en Sudamérica existen unos bellos animales, estuve tres días en plena caza…]
Ahora me hablaba de animales, me contaba sobre un tigre.
[-Todos los cazadores en el juego deseaban ganarlo, pero ninguno de ellos tenía lo suficiente para hacerlo. Tuve que cazar mucha comida para mantenerme atento.]
-¿Qué un tigre?, ¿era grande?, ¿lo mataste?
[-Siempre mato a las presas que persigo.]
Escuché atentamente sus palabras, su voz sonaba sincera, pero todo lo que dice me parece muy bueno para ser verdad.