-¿En qué momento te acercaste? No había nadie antes.
-He estado en mi biblioteca todo este tiempo. Te vi salir de la habitación y escabullirte como un gato ladrón.
No tenía idea de que estaba allí ¿Cómo pudo suprimir sus feromonas por completo?
-Dime, ¿Por qué te acercaste en secreto?
Sentí su mirada sobre mis labios secos. Los labios de Baek Do-ha se acercaron hacía mí de repente. Sus labios estaban sobre los míos mientras yo intentaba hablar. Retrocedí por instinto, pero Do-ha sostuvo mi barbilla con sus manos insistentemente y pegó sus labios en un beso profundo que parecía chuparme por completo, mordió mis labios vigorosamente. Separo por un momento sus labios de los míos para inspirar profundamente y volvió a besarme como si estuviera comiéndome la boca, su lengua caliente se abrió paso por mis labios, lamió todo sobre mis labios e incluso en la membrana interior de mi boca.
Era un aliento caliente y blando que pasaba a través de nuestros labios. Su aliento y saliva eran tan dulces que hormigueaba la punta de mi lengua. Sus feromonas también se calentaron dulcemente. No podía parar de pensar que no era mi primer beso con él. Ahora siento que vale la pena acostumbrarse a ese dolor, mi cuerpo tembló como si una descarga eléctrica pasara. Abrí la boca para aceptar su beso. Sin apartarlo, lo abracé en silencio y temblé. Aunque no reaccioné activamente, mi cuerpo se fue calentando constantemente. Sus manos alrededor de mi cintura comenzaron a calentarse, giré completamente y quedamos cara a cara, sostuvo mi espalda fuertemente y me jaló con fuerza hacía sí. Sus labios rojos que estaban fuertemente aferrados a los míos me soltaron un momento, pero volvieron a besarme. Abrí la boca, estaba dispuesto a aceptar sus besos, pero él no siguió de inmediato, se detuvo antes de seguir y se rio.
-Desde ahora quiero que me beses siempre de esa manera. – Esperé, quería que me siguiera besando. En realidad, quería que me empujara y me besara fuertemente, él me besó y se rió en voz alta y dijo de manera juguetona
-: Qué lindo. Me dio algunos besos más ligeros, como si estuviera susurrando y picoteando alegremente, me hacía cosquillas. Sentí que mi cuerpo no lo soportaría y se caería; así que me sujeté fuertemente a su cintura.
Mordisqueé levemente su labio inferior como si quisiera comerlo, besé su boca de la que salía un aliento jadeante. Su lengua gruesa apretó mi boca y la recorrió completamente, haciendo que mis mejillas se hincharan como si estuviera comiendo un enorme caramelo. Mi lengua y la suya quedaron enredadas, me estremecí, no sabía cómo reaccionar ante eso. El movimiento era suficiente fuerte, pensé que podría arrancar mi lengua de un tirón, no había forma de poder liberar la presión que sentía en ese momento, tener en mi boca su aliento caliente era como sentirme mareado.
Con una mano sostuvo mi espalda y con la otra sostuvo mi cabeza, cambió todo por completo, apretaba mis labios como si estuviera jugueteando con ellos, era algo de lo que no sentía el más mínimo dolor ni miedo. No sabía si podría seguir así que me sujeté fuertemente de sus brazos, que cambiaron de posición y agarraron fuertemente mi cintura, en esa posición era aún más difícil separarme de él.
Mientras él me sostenía fuertemente, recibí muchos besos. Era una sensación muy excitante, sus labios podían pasar por toda mi boca, mi cuerpo se sentía bien, él separó sus labios de los míos y di un gran suspiro, mis labios temblaban del placer, estaban todos calientes de tantos besos. Las feromonas de Baek Do-ha lentamente se esparcieron y mi cuerpo sentía una agradable sensación de placer, mordí un poco más sus labios mientras me miraba fijamente, el calor de repente se sentía genial. Di un largo suspiro a través de mis labios entreabiertos. Mis labios hormigueaban empapados de saliva.
-¿Tu cuerpo está bien?
-Sí. -Asentí con la cabeza, exhalamos nuestro aliento húmedo y nos miramos por un momento. Ninguno de los dos dijimos nada. Los alrededores estaban tan silenciosos que solamente se podía escuchar el aliento de ambos. Sus ojos me miraban insistentemente. Sus ojos son muy bonitos, tiene un rostro que hace que olvide el paisaje. Frotó mi boca con las yemas de sus dedos. Frotó mis mejillas que estaban rojas por lo sucedido y frotó mis ojos. Sin siquiera parpadear me miró con ojos tranquilos. Las pupilas eran muy claras como una ventana de cristal. Era un poco incómodo estar frente el uno al otro, así que traté de dirigir mi atención hacía otro lado.
-¿Aún no has tomado el inhibidor?
– No. Cuando tomo medicamentos con el estómago vacío, me siento muy mal. Estábamos tan cerca que se sintió un poco incómodo, el movió su cuerpo y acercó sus labios a mis oídos. Mordisqueó el cartílago de mi oreja con sus labios, luego enterró su nariz en mi cuello agitado y respiró hondo.
-Tu olor me gusta. No importa cuánto lo huela, no me cansaré de él. Debido a todo lo sucedido estaba confuso como si hubiera bebido alcohol por la mañana.
-¿Te gusta la casa? – Sentí sus labios pegados a mi cuello, era como un cosquilleo y hormigueo. Los músculos de mi cuello se tensaron y mis hombros se estremecieron, era una sensación placentera.
-La casa es demasiado…
-¿No te gusta? Solamente con oler su aroma o lamer sus labios, se desata un éxtasis. La parte de atrás de mi cuello comenzaba a calentarse, daba miedo. El marca en mi cuello no desaparecía. Pensé que me soltaría, pero los brazos que cubrían mi cintura no se movieron por nada.
-Es una magnífica vista. El paisaje exterior es tan hermoso.
-¿Quieres decir que te gusta?
-Es una buena casa, pero creo que es demasiado para mí. Mi condición física ha mejorado, creo que me iré. -Baek Do-ha levantó la cabeza después de quitar sus labios de mi cuello.
-Entonces, ¿quieres volver a la casa de Hyun-seo?
-No. Es mejor morir en la calle, nunca volveré a esa casa.
-No digas cosas tan estúpidas.
-No. Si el Sr. Baek Do-ha no hubiera hecho eso, habría estado allí hasta que algún accidente me ocurriera.
-Entonces simplemente quédate en esta casa.
-No quiero hacer eso.
No lo dudé ni por un segundo y dije que esta casa es espaciosa y muy cómoda, no está nada mal, pero era muy bueno para ser cierto. Lo que más me gustó fue el paisaje exterior. La vista del rio Han es hermosa y el atardecer se ha de ver asombroso desde esta casa, pero no es mi casa. Nada es mío, incluso la ropa que llevo puesta no es mía.
-Definitivamente no me puedo quedar, esto no es adecuado para mí.
-¿Por qué no?
El tono de Baek Do-ha se volvió duro. Sus ojos, que hace un momento eran cálidos, se endurecieron inmediatamente. Su tono, sus expresiones fáciles y ojos, todo cambió de un momento a otro como si alguien girara de inmediato. Sus feromonas también cambiaron de cálidas a hostiles de inmediato. La atmósfera amistosa se congeló rápidamente.
-No. No te dejaré ir.
-Sr. Baek Do-ha…
-Debes entender que no tienes otra opción, estoy dándote una orden, no pidiendo tu opinión.
Me quedé atónito. Sus labios que anteriormente derramaban besos con dulzura y su lengua que me derretía, ahora decían palabras venenosas llenas de espinas.
-¿De qué está hablando?
-¿Acaso dije algo que sea difícil de entender?
-Dices que no tengo otra opción.
-Exacto. Todo lo que tienes que hacer es elegir una casa en la que quieras vivir. Si no te gusta esta casa, puedes elegir otra. No te irás de aquí, no saldrás. No tienes elección. No puedes salir solo hasta que yo lo diga. Tú eres mi amante.
-Amante ¿Sabes que esa palabra significa que tú ahora eres mío?, ¿me perteneces?
-No. -Ya había respondido descaradamente. De mi boca salió una risa descarada. «En verdad esperaba una excusa más romántica, en verdad fui un estúpido».
-En verdad, ¿eso es para ti un amante.? Esas palabras simplemente salieron de mi boca. En verdad creo que no pensé mis palabras. Fui un ingenuo al pensar que algún día encontraría a la persona que sería mi amante. Para esta persona el significado de amante era muy horrible.
«¿Acaso este hombre estaba tratando de ocultar su obsesión viscosa y retorcida con la imagen de una persona llena de dulzura?»
-¿Por qué no me pones una correa y me encierras?
-Quiero hacerlo. – Su respuesta me tomó por sorpresa, en serio quería golpearlo, «qué charla tan ridícula». Entendía que era realmente difícil tener una conversación normal con este hombre.
-¿De qué tontería está hablando Sr. Baek Do-ha?
-Es demasiado molesto escuchar algo así ¿verdad?
Se sentía como si fuera a explotar, así que cuando le contesté inmediatamente mostró una apariencia desagradable. Movió su cuerpo y empujó sus hombros. Su cuerpo era tan grande y rígido que mi expresión molesta cambia de inmediato.
-Me pregunto por qué mi precioso Seol-Woo cambió de inmediato su linda forma de actuar.
-Déjame ir. -Mi voz tembló.
Su feromona comenzó a rezumbar constantemente en mí. Debido a esa feromona me vuelvo débil, mi rebeldía desapareció, no duró nada. Esa maldita feromona que me vuelve loco, me hace llorar y reír al mismo tiempo, que me nuestra el placer supremo y el infierno en un sinfín de deseo sexual, es el éxtasis y el infierno al mismo tiempo. Es como un tsunami que forma y azota sin previo aviso, es algo que mi voluntad no puede evitar. Sus labios, que me habían estado hablando de forma descarada, volvieron.
-No lo hagas. Déjame ir. -Giré mi rostro y lo evito, pero sus labios siguieron tenazmente y tocaron mi cuello.
Su feromona constantemente abrumadora, cavó en mi nariz. Me faltaba el aliento, mi cuerpo perdió la fuerza y mi trasero se calentó. Se estremecía y comenzó a mojarse de inmediato, tanto que la parte trasera como la delantera estaban tan mojadas e incluso la ropa interior se pegaba a mi piel.
-Antes de desayunar ¿podemos hacerlo?
-No, no sigas.Hmmm, Oh, ugh. -De mí salió una voz temblorosa y débil, mezclada con un gemido acalorado.
«¿Cómo puedo detenerme cuando estoy tan excitado?» Sus labios, masticaban mi cuello tembloroso, tenía una actitud tan ridícula. Sus grandes manos agarraron y frotaron mi trasero. Tiró ambas nalgas con fuerza, como si quisiera arrancarme la carne de ambos lados para dejar al descubierto mi agujero. Su parte inferior del cuerpo se volvió más tensa a medida que la parte inferior de mi cuerpo se calentaba más. Cada vez estábamos más calientes, la parte inferior de su cuerpo me rozaba y su boca mordía mi cuello con fuerza. Traté de soltarme y le golpeé en su barbilla. No era la primera vez que lo golpeaba por rebeldía, pero esta vez estaba tratando de separarme de él.
-Eres lindo ¿Por qué haces esto? –Su rostro me miraba mientras sonreía, pero su voz estaba empapada de deseo.
–Me vuelvo honesto con los deseos de mi cuerpo, pero eso no tiene nada que ver con mi corazón.